hablar en otro idioma como el gusto que se da un niño cuando juega al menos desdoblar una palabra-sábana cuando da miedo
el único gusto perdido por la idea es el envejecimiento de la palabra caída solemnemente en el papel muchas veces fino en todo caso mirado con respeto
el fuego sabe el valor de la oportunidad que es el tiempo hecho política la marca de un acuerdo sin garantías tan frágil la filosofía
urdir en otro lado siempre y cuando sea tierra virgen la suerte juega con el soberano a quien no le importa que las reglas caigan patria es solo un tablero que se puede reconstruir con cada nuevo quiebre partida marca o como se lo llame
curioso el empuje del que sigue en trayectoria pues en realidad esta se inventa contraria a la idea multitudinaria pues le viene desde afuera el mínimo retazo para dibujar un paisaje
contrariar el tilo y su tendencia al mirlo quebrar la roca del pasado y aventar la tierra en otro lado para que llegue nueva una y otra vez de frente aunque todos desde su perspectiva la vean de lado
soplar la espita y el sonido amargo de las luces que vienen como un ruido mas no de frente y en realidad es serotonina
de una gota nace un vaso manipulado de un mensaje un ojo nuevo deberá ser compensado alrededor del labio y la osamenta una tormenta repetida
no hay conclusión si no se cierra la cabeza a más aprendizaje que es del resto un modo sabio ocular salvaje abierto al desfalco
sin prisa mas sin desperdicio habrán historias construidas desde el juicio hacia lo efímero que no es solo señoreaje es eclipse incapaz de calcular
glotonas multitudes turbias esperan impaciente si es que lees tu declaración de independencia y si la encuentras coherente continúa no hay fauces
aunque sea tarde habrás notado lo pensante no es una división un muro hecho de caucho
una práctica de espera hecha de mover manos de habituarse al momento adecuado porque no se recuerda aquello superfluo
la palabra movida esperando a ser pensada sola la desproporción académica y su diccionario de señas adaptadas que hacen notar lo que ya sabíamos
nada nuevo todo nuevo apenas nuevo muy nuevo nuevo toda teoría avocada al centro
otro nombre propio estampa la expropiación la selva negra del colono ahora ciudadano antes extranjero mendigas saber el nombre para lucrar
no tienes otra sino enfrentarte de forma vetusta
como cuando se quema el aceite y te quejas de ser descuidado
ahí el tímpano trina por una vez como lo hacía
hace milenios me dicen naciste por eso no entiendes
de la bondad construyeron unos el tiempo de la metáfora
metieron en saco la frontalidad te treparon a la montaña y te hicieron morir de hambre
pero creciste y difuminaste en las plantas
sin hacer nada
hervir café para referenciar el gusto perdido
que sigan identificándote con la bruma quizá el canto
dejada la exquisitez la tierra ya no te ahuyenta