31 January, 2011

Tráelo a jugar con la bandera

pues de a poco que sus lágrimas barrían

la casa   la nación   la algarabía

fue tan clara su reacción que despertaba

en los niños el fulgor de la manía

como adobes de una fecha tras los libros

nunca el día ni la espera oscurecía

Tráelo ya pues desesperan

los triciclos las muñecas de la abuela

¿qué esperas?

Maldices los asientos como dunas

ya no tragas tu venganza moribunda

tú, que atormentas la prisión de la injusticia

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