28 April, 2012
Agotado el tiempo te acuerdas
del pacto que una vez hiciste:
mantener el ánimo,
hacer todo alegremente.
Y te preguntas si de haberte acordado
habría cambiado en algo
la sensación de pérdida
por la que empezaste en un comienzo
a moverte.
Si bien reducido, hay todavía futuro
por donde andar inciertamente.
Disimular con la esperanza de siempre
y encontrarte.